viernes, 4 de marzo de 2011

La Soledad

Siento una soledad, un vacío aquí dentro, siento que me ahogo, que muero poco a poco y lentamente. Trágicos son los acontescimientos que viví, el amor, el desamor, los problemas con papá y mamá, las cosas, para mí siempre iban de mal en peor. Sé que soy muy joven para tener el rumbo de mi vida defínido, pero en estos instantes, me siento solo, siento que nada existe y que mi mundo de desmorona como un castillo de arena. La vida te da duros golpes, eso el mundo entero lo sabe, y esos golpes te hacen cambiar, cambiar para bien o para mal; es así como comenzo esta pesadilla que ahora vivo, cambie de actitud, de forma de pensar y de ser, tan drásticamente que ni yo me reconosco. Soy otro, otro, otro; no soy ese niño inocente que antes era, lo cual siendo sincero, extraño mucho, soy una persona llena de rencor, buscando poder hallar el desfogue de mis sentimientos para que no se encuentren encarcelados en una prisión de la cual no puedan salir, y al no salir derrumbarme completamente con ellos. No sé cual sean las razones exactas por las que soy así, pero incluso siento cólera hacia mis padre, sí ellos los que me dieron la vida, los que me trajeron al mundo (a este mundo que por cierto, aveces pienso hubiese sido mejor no abarcar), a este mi hoga, lleno de tristezas, de penas, alguno que otro recuerdo de alegría, pero mi vida llena de penunbra siempre estubo; sus peleas, sus conflictos, las discusiones (no refiriendome a problemas que causaran mi desobedienca), todo eso me lleno de ira, de rabia, no soportaba ver todo eso.
Los problemas comenzaron cuando solo tenía 3 años, mi padre fue infiel a mi madre sin motivo aparante, al menos eso fue lo que creía o me decían, desde ahí comenzo el cataclismo de mi vida; la mayoría de problemas me inmiscuían a mí. En esos momentos no entendía nada, pero los recuerdos los tengo plasmados en mi mente y son imposibles de olvidar, y ahora es cuando entiendo lo que sucedía en ese entonces. Cada día era una agonía para mí, desde muy pequeño aprendi a ser independiente, pero a la vez dependiente, me volví dependiente de lo que dijera mi madre, pero independiente, porque mis sentimientos fueron aflorando ( el problema fue la, llamemoslo así, deficiencia de expresión que tengo).
Llege a los 12 años y creía en todo lo que mi madre decía, no tenia mi propia actitud crítica, la relacíon entre mi madre y yo era muy buena, en ese espacio temporal. Mi pasión la descubrí justo a esa edad, a los 12 años, comenzando la secundaria; y con la primera experiencia amorosa, pero ese es otro tema que quizá luego me anime a describir; fue ahí cuando empeze a valerme por mí mismo, comenzo mi rebeldía (entiendase en la forma de pensar distinto no por capricho si no por una razón justificada), mi rebeldía por el querer afrotar a mis padres por todo lo que me hicieron, viví muchos momentos agónicos, el ver como mi padre llega ebrio más de un millón de veces a nuestro hogar, ver como discutía con mi madre y yo escondido en una esquina, sin poder hacer nada, pero una vez, mi padre quizó golpear a mi mamá, lleno de ira me levante contra él, lo golpee, nunca olvidare esa escena, ni me la perdonaré, aunque se que no fue casí nada el daño que causé y el daño grandísimo que él a mí me causo, no me perdonaré nunca eso. Su reacción fué obvia, se avalanzó contra mí, y no es mucho decir que termine con algunos moretones y el labio roto, pero la escena se puso dramática, al acercarce mi papá y decirme que le disculpara, que no sabía lo que hacía, y yo como siempre, lo disculpaba, por todo siempre lo disculpo, ese cúmulo de recuerdos, de torturas y de peleas, de disculpar de corazón y sentir que de nada servía, creo que fué lo que me hizo así.
Continuará.....

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